En esta campaña teníamos dos objetivos fundamentales, el primero comprobar la continuidad de la galería situada en el punto más profundo, una gran sala situada a 100 metros de la entrada y -46 de profundidad. El segundo objetivo continuar desde este punto por una galería ascendente que daba la impresión de poder salir a superficie. Para la inmersión habíamos preparado por cada buzo dos botellas de acero de 12 litros en la espalda cargadas con trimix 25/25 una botella lateral de 12 litros de aluminio con el mismo gas y como gases descompresivos dos botellas de etapa con nitrox 50 y oxigeno puro. Empezamos la inmersión y Rubio va delante , a los cincuenta metros existe la única restricción que de momento hemos encontardo en el sifón. El paso no es demasiado estrecho pero un poco incómodo, hasta ahora lo habíamos superado con botellas de seis litros y sin problemas, con esta configuración hay que buscar la postura. Le tomo bien las medidas para ver si puedo pasar con mi rebreather en el caso de que el sifón continúe y parece que sin problemas. en este punto Rubio decide instalar hilo a pesar que el del año pasado parece estar bien, coje un carrete de 130 metros. Cuando lleganos a la sala de -46 metros yo exploro el ramal lateral mientras el afianza el hilo en un saliente de roca, la galería es grande, 6 metros de alto por cuatro de ancho pero a los diez metros me encuentro una pared de roca que la cierra completamente. Entonces volvemos a la galería ascendente que exploramos el año pasado, llegamos a la punta y la superamos subiendo por la chimenea que nos pareció que subia a galería aérea pero tras subir unos diez metros nos topamos con un techo de roca negra, no hay continuidad hacia arriba así que descendemos al poco se agota el carrete de 130 metros y yo cojo uno nuevo para seguir instalando, la galería es amplia y oscila en pequeños ascensos y descensos entre los 28 y 31 metros. Mientras instalo el nuevo hilo mi regulador de la botella de etapa empieza ha entrar en flujo y a perder gas,(es la primera vez que me pasa en un sifón, después de tantos años explorando) lo normal en estos casos es abortar la inmersión pero valoro que mis botellas de espalda estan intactas y que tengo aún margen de seguridad, así que cierro la botella lateral y sigo con el gas de espalda, cuando he desplegado unos cincuenta metros de hilo alcanzo una sala redonda de unos 4X5 metros desde la que la única continuidad es un pozo totalmente vertical descendente, estoy a -31 metros y el fondo del pozo está a más de diez metros así que cuando llege al fondo estaré a más de cuarenta metros. En este caso mis margenes de seguridad ya no me cubren así que me doy la vuelta y le indico a Rubio que volvemos, llevamos 33 minutos de inmersión y estamos a más de doscientos metros de la entrada. Cuando volvemos una espesa nube de sedimentos nos cae encima desde el techo, durante casi todo el camino de vuelta la visivilidad es cai nula, vuelve a ser buena al llegar de nuevo a la zona profunda. Desde los -46 metros empezamos nuestras paradas de deco cambiando a nitrox 50 en 21 y a oxigeno puro en 6, el tiempo total de inmersión son 95 minutos. Como resumen en el sifón queda un total de 250 metros de galería explorada y una continuidad descendente, la proxima vez que buceemos será con rebreathers esto nos dará mucho más margen para explorar y evitará en gran medida la caida de sedimento de los techos por la casi total ausencia de burbujas. Quiero volver a resaltar la colaboración que hemos tenido por parte de tantos grupos y espeleólogos que han porteado todos los petates, algunos de 18 kilos de peso, la verdad que ni en nuestros mejores sueños hubiesemos imaginado que ibamos a poder sacar todo este material de una sóla vez. ¡MUCHAS GRACIAS A TODOS!. Ah, se me olvidaba que mientras buceabamos se revisaron unas incognitas en el techo de la galería que da al segundo sifón sin resultados por lo que las proximas campañas seran sólo de buceo.» las fotos son del compañero Baltasar Felgera.