Espeleo Andalucía – AAES

El pasado día 9 de Agosto y tras varias salidas de preparativos en las que a parte de montar un vivac se estuvo sacando arena del sifón terminal de la sima se consiguió superar el dichoso sifón. Han pasado algunos años desde que el compañero del CES Salvador superara el sifón y constatara la continuidad de la sima en galería aérea. En años sucesivos ha estado colmado de arena y esto ha hecho imposible su superación, yo mismo lo intenté hace un par de años pero me quede literalmente atascado entre techo y suelo. Como ya vimos entonces era necesario destaponar de alguna manera el estrecho conducto. La colaboración de diferentes miembros de los grupos involucrados en esta exploración CES, Pasos largos, GESUB, AAES y que durante horas estuvieron extrayendo arena con ayuda de palas ha sido decisiva. Cuando Salva y Yo abordamos el sifón, no estábamos completamente seguros de que esta vez si sería la definitiva, por lo que la espectación era máxima. Quiero imaginar la cantidad de ideas y especulaciones que pasarían por las cabezas de los miembros del equipo cuando nos vieron desaparecer durante cuarenta y cinco largos minutos. Yo puedo contar lo que sentí al seguir el hilo guía dejado por Salva por aquel estrecho conducto y confiar en llegar al otro lado sin atascarme, con un techo de roca en la espalda y el pecho rozando un fondo de barro y arena que nublaba totalmente la visivilidad . Al otro lado por fin aparece la galería seca, que no siendo espectacular en tamaño nos parece grandiosa en comparación con el exiguo conducto inundado que hemos dejado atrás, además la galería desciende a favor de una falla de excavada por el agua. Pasamos largo tiempo descendiendo en oposición, parece interminable, hasta que una vertical de unos ocho metros que no podemos destrepar nos detiene, calculamos haber descendido más de treinta metros.

He pasado ya algunos sifones en mi vida, la mayoría en solitario. He sentido la embriagadora sensación de pisar zona virgen e inexplorada y de hallar con ello la continuidad siempre deseada. En este caso ha sido en compañía de alguien que lo hizo y que durante diez largos años soñó y deseo volverlo a hacer, no deja de ser esta una nueva experiencia en mi vida como explorador. Me alegro de haber podido estar allí para contarlo.

PEPÓN