Autor: espeleokarst

El pasado día 29 de septiembre se concluyó la campaña de exploración en la sima. El objetivo principal era la exploración y topografía de la galería Maki, situada tras el sifón terminal S-5 y que fue parcialmente explorada por un espeleobuceador en la campaña del año 2009. Esta galería de grandes dimensiones daba muchas esperanzas de continuidad a la cavidad. Para esta nueva campaña se volvería a superar el sifón, pero esta vez por equipo de dos espeleobuceadores que constaran la continuidad de la galería, su exploración y finalmente su topografía. La idea era también portear material de instalación ligero (chapas y burilador) para superar verticales en caso que la sima continuara en profundidad. Hay que destacar que se trata de un sifón complicado por sus dimensiones reducidas y que el lecho del mismo esta completamente cubierto de barro lo que obliga a bucear en visibilidad cero y lo que complica el transporte del material a trabes del sifón. La posibilidad de vaciarlo es factible pero complicada porque el sifón esta siempre en carga y recibe un caudal de agua nada despreciable. La longitud del sifón es de 25 metros y su profundidad máxima es de cinco metros.

La sima fue instalada a mediados del verano del presenta año comprobándose el estado de los sifones temporales intermedios que permitirían el acceso al sector final de la cavidad ya que estos sifones se llenan en invierno impidiendo el acceso a la punta de exploración.
El 30 de Agosto se realiza una salida en la que se transporta algo de material de buceo que se deja situado antes de los sifones temporales con idea de evitar que una posible crecida evitara su recuperación. En esa misma salida se realizan una serie de actividades complementarias como la exploración de una galería en principio sellada por un corto sifón que es vaciado y que da como resultado unos treinta nuevos metros de meandro hasta un paso impenetrable. Por otro lado se intenta el vaciado con mangueras del sifón S-4 (una de las incógnitas pendientes de la cavidad) cuyo nivel de agua desciende casi un metro pero sin llegar a vaciarse por completo porque no podemos lograr el suficiente desnivel. No obstante se consigue ver que la base del sifón es un estrecho laminador que parece que puede desembocar en una galería más amplia. También se realiza la topografía de algunos sectores de la zona final de la cavidad que sólo estaban croquizados.

Tras barajar fechas que nos vinieran bien a todos se plantea el buceo para el día 20 de septiembre. En la sima ya tenemos un equipo de buceo antes de los sifones terminales siendo necesario bajar un segundo equipo, por lo que hay que reunir a un grupo de al menos seis espeleólogos.
Finalmente el día 20 se realiza una entrada en la sima para bucear, pero por determinadas circunstancias personales de uno de los espeleobuceadores se decide posponer la exploración del S-5 para el fin de semana siguiente dejando no obstante todo el material de buceo a pie de sifón. Se realizan no obstante tareas pendientes como la exploración de una galería superior, pendiente desde la campaña del 2012 y a la que se accede tras una pequeña escalada. La galería culmina en un pequeño sifón que una vez vaciado da paso a un conducto que se hace impenetrable. También se realizan nuevas escaladas, que complementan a las ya realizadas en la campaña del 2009, en la sala previa al sifón terminal, buscando una comunicación con el post-sifón que no dan resultados.
En todas estas actividades previa al buceo y en la retirada final de equipos participan un total de 19 espeleólogos de diferentes grupos:
David Canto, Juan Antonio Moreno, Marta Moya, Pilar Orche Amaré, Pepe Merino, Diego Fernández, José Antonio Oleado, Francisco Fernández, Berni Orihuela, Ricardo Tamayo, José Pardo, Manu Guerrero, José Luis Rubio, Tomás Periañez, Rafa Martín, Pedro Jesús Dominguez, Alex Fernández, Adrián Tirado y Fernando Rodriguez.

Las condiciones metereólogicas para el fin de semana del 27-28 no son buenas, dando previsiones de fuertes lluvias en la zona por lo que decidimos esperar al Lunes día 29, cuando el riesgo de lluvia parece ser nulo. Habían caído unos cincuenta litros por metro cuadrado en la zona durante esa semana y no sabíamos a ciencia cierta en que estado nos íbamos a encontrar la Sima pero decidimos seguir adelante con los planes. Así las cosas, un reducido equipo formado por tres espeleólogos que seríamos Manu Guerreo, José Luis Rubio y yo, José Millán nos dirigimos a la sima para abordar el buceo, Manu se quedaría al otro lado del sifón como apoyo, mientras se exploraba la galería Maki.. Afortunadamente las lluvias no habían llegado a poner en carga la sima que se encontraba con unos niveles de agua similares a los encontrados en anteriores incursiones, por lo que podemos abordar la exploración sin problemas.
Llegados al sifón y una vez equipados lo primero que hacemos es reinstalar el hilo guía colocado en la anterior campaña, quitando el existente y sustituyéndolo por otro más grueso y seguro dadas las nulas condiciones de visibilidad. Tras la instalación del nuevo hilo se pasan cuerdas y equipo de progresión vertical. En la campaña del 2012 la exploración quedó detenida en un resalte bajo el que se observaba una clara continuación de la galería. La salida del sifón es una gran sala de casi treinta metros de anchura y unos diez en su radio más ancho. Las paredes están parcialmente tapizadas de barro lo que delata inundación por lo que pensamos que estamos en un antiguo nivel freático a día de hoy desfondado. La galería es en principio descendente y muy vertical pudiéndose no obstante destrepar unos siete metros hasta un resalte donde se detuvo la exploración que en la anterior campaña se realizó en solitario.

Buceo del sifon S-5, Campaña 2012.

Finalmente podemos superar el resalte sin necesidad de instalar cuerda por uno de los laterales del pozo y accedemos a una sala de medianas proporciones cubierta por un gran caos de bloques desde la que la continuidad es un laminador de unos tres metros de anchura por apenas un metro de altura y por la que discurre el cauce de agua que mana del sifón. Se avanzan unos treinta metros por este laminador que va progresivamente haciéndose más estrecho hasta alcanzar un punto que resulta impenetrable y por el que se cuela toda el agua que circula por la galería. El paso parece además estar parcialmente sifonado. En este punto se detiene la exploración realizando un croquis topográfico del nuevo sector explorado, Las únicas continuidades posibles son dos ventanas situadas en el techo de la galería inicial pero hace falta material de escalada para acceder a ellas. De una de estas ventanas proviene un aporte de agua marcado en la roca pero que esta completamente seco. Una vez finalizada la exploración decidimos intentar sacar todo el material de buceo de la zona conflictiva ya que el tiempo esta inestable y una crecida podría llenar los sifones intermedios. Sólo somos tres y hay siete petates que sacar así que recurrimos a algunas técnicas de fortuna para las verticales y vamos haciendo cadenas humanas consecutivas para ir extrayendo todos los petates por la galería del espeleoproyec que es el sector más duro de la cavidad. Afortunadamente a mitad de camino se une a nosotros Adrián, que ha llegado más tarde y ha bajado a nuestro encuentro. Con mucho esfuerzo y ya entre cuatro conseguimos dejar todo el material fuera del espeleoproyec donde en días posteriores el resto del equipo sacaría de la sima el material que nosotros no pudiéramos extraer a la calle.

Esta exploración ha truncado las expectativas de continuidad en profundidad quedando la punta de exploración a -198 metros. Las posibilidades de continuidad están en esas ventanas superiores a las que habría que acceder con equipo de escalada, siendo la principal dificultad para ello el S-5 y lo complicado de transportar este equipo por un sifón así. Como ya hemos comentado existe la posibilidad de vaciarlo pero con la dificultad añadida de que se llena constantemente, además el sifón tiene forma de “V” por lo que habría que vaciarlo prácticamente entero para poder superarlo sin bucear.
La otra incógnita pendiente es el S-4, sifón que podría llegar a vaciarse si conseguimos algo más de desnivel, cosa posible gracias a una fisura vertical por la que se podrían introducir las mangueras para conseguir desnivel previa desobstrucción de la misma.

Queremos agradecer la colaboración desinteresada de D. Antonio   Morales, dueño del Bar Alameda que en esta como en anteriores campañas nos ha cedido el caserío situado en la zona como base de exploraciones. Adjunto el detalle de la nueva zona explorada y la topografía actualizada.

La AAES ha comenzado una nueva campaña de exploraciones en la Sima del Navazo Hondo cuyos objetivos principales son la exploracíón del gran colector situado tras el S-5 y la exploración del S-4. La Sima se ha reinstalado y se han acometido labores de vaciado del S-4 mediante mangueras y porteo de material de buceo al S-5. Las labores de vaciado del S-4 no han podido ser concluidas completamente aunque se vislumbra una clara continuidad de la galería al otro lado del sifón,en cuanto al S-5 esta previsto la realización de una inmersión y una nueva punta de exploración para los días 20 y 21 de Septiembre. Así mismo se han realizado levantamientos topograficos de algunas galerías que estaban pendientes de topografiar en la zona del «espeleoproyec». Las fotos son de Manuel Bernal.